CARTA A RADICALES
SANTIAGUEÑOS
Tendrán que disculparme la
ironía, pero lo que diré, se acerca bastante a la verdad. Es más, en muchos, es
pura verdad. De lo contrario, tendrán que demostrarme cuanto estoy equivocado
al señalar lo que sigue.
En una carta anterior, opinaba…
que pareciera que muchos correligionarios están esperando “la carrosa”; si me
preguntan porque, fácil (sin acción y por lo tanto callados). Otros, llenos de
pruritos y epítetos (que social democracia en el mejor de los casos, cuando no zurdos
o dentro de una militancia). No ahora, muchísimo tiempo atrás, supe reclamar
actitudes parecidas a mis correligionarios cuando cursaba una acción e invitaba
reunirnos a discutirla; recibía preguntas como: quienes estarían o en casa de quien, y la
respuesta era no rotundo, porque estaría mengano o seria en fulano. Nunca preguntaban
que trataríamos (sonaba querer estar en una reunión social y no en la
militancia de resolver problemas recurrentes en contra del bienestar social).
Lamentablemente se repite la desidia.
Cargo con la cultura de
escuchar a todos, sean partidarios o no, incluso extrapartidarios. Busco la
oportunidad de acompañar una idea de política pública y aportar probidad en conductas
de acciones útiles. De propios y/o extraños aprendo, procurando trasmitir con
coherencia el valor a mis semejantes de una causa publica para lograr el bien
común.
No participar en la lucha por el sistema
republicano legado en días liminares de la construcción nacional. Lejos de
imaginar un palco para sus egos, es terminar la ñata contra el vidrio.
QUEDO EN ESPERA A UNA INVITACIÓN, SALUDO
ATENTAMENTE.
Santiago del Estero, noviembre 11 del 2020
Juan Luis Coria
3854386125
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